Las calles de Puebla se cimbraron y se estremecieron las torres de la Catedral Metropolitana porque desde la Avenida Juárez marchando por el Paseo Bravo para pasar por Palacio Municipal y Casa Aguayo, universitarios sellaron la añejas diferencias del pasado para dar paso a una lucha común por la inseguridad que nos "esta matando" y prevalece en el estado.

Ningún universitario se perdió la marcha para exigir el derecho que las autoridades estatales y municipales cumplan sus promesas de campaña que comprometieron a otorgar, pero como prometer no empobrece, más de 150 mil chicos y chicas de universidades públicas y privadas se han entrelazado "porque está guerra se ganará". 

La mega marcha se realizó después de 10 días de que aparecieron los cuerpos sin vida de cuatro estudiantes en Xlamimilulco, Huejotzingo, los universitarios de más de 80 entidades educativas de Puebla marchaeon por las principales calles de Puebla en demanda de un plan de seguridad y de justicia por sus compañeros asesinados. 

Algunos estudiantes salieron de la Avenida Juárez, unos de CU,  otros de la Facultad de Medicina de la 13 Sur, algunos más desde sus instituciones con la demanda a flor de piel, "nos están matando en frente de la gente".


Los estudiantes arribaron al zócalo; mientras otros contingentes continuaban en el Paseo Bravo, unos más sobre la Avenida Reforma y otros alcanzaban Casa Aguayo.

Los estudiantes marcharon para exigir  acciones para que se aplique la ley y realmente se castigue ejemplarmente a los asesinos de la muerte de Francisco Javier Tirado Márquez,  Ximena Quijano Hernández y José Antonio Parada Cerpa y del conductor de una unidad Uber, Josué Emanuel.

Los universitarios mantienen el plantón a las afuera de Casa Aguayo, coreando: "no somos cinco, no somos 10; señor gobernador miremos bien".