Para mejorar la eficiencia en el transporte público, en la ciudad de Puebla, es muy importante tener todo el sistema RUTA terminado y articulado, porque nos hemos quedado en muy pocas líneas contra la visión de articulación territorial que estaba planteada.

Para el profesor de la Facultad de Arquitectura de la UPAEP, Octavio Flores Hidalgo, cuando se tengan un trabajo eficiente en esa articulación regional, muchos van a optar por no usar el vehículo privado.

Eso sucede, recordó, en algunas zonas de la Ciudad de México, donde llegan a un punto, se ponen en un estacionamiento o cerca de una estación del metro y se mueven a toda la ciudad y luego regresan y no tienen que hacer grandes desplazamientos ni gastos de gasolina.

“No hemos estado conscientes de esa virtud, aunque el mantenimiento siempre tiene un costo, pero con eso se bajarían las emisiones contaminantes y el costo beneficio, que se dan entre costos negativos y costos positivos”.

Ante eso, dijo que, hay que ponderar los beneficios, la salud y la seguridad, que son importantes, además de la eficiencia, “hay cosas que serán más incluyentes, porque tampoco tenemos esa parte, de acceso para algún tipo de discapacidad temporal o permanente en esta forma de movilizarnos”.

Por otro lado, el urbanista poblano advirtió que lo mismo sucede con las ciclovías, “si no las seguimos promoviendo la gente no va a usar la bicicleta”.

"La ventaja de tener una ciclovía es mucha y de todos conocido, por ejemplo, aquí a la universidad, los jóvenes llegan en bici y les gusta, aunque se andan rifando el físico, son jóvenes y se arriesgan en ciertas zonas”.

Flores Hidalgo, señaló que, algunas personas llegan al trabajo, agarran las bicis públicas y se mueven a las distintas dependencias para hacer sus diligencias, entonces también es una facilidad, porque tardan en moverse, en encontrar estacionamiento y con eso dan más vueltas y gastan más.

El experto en temas de movilidad aseveró que, no se trata el tema, con una visión desde lo complejo, porque todas estas interrelaciones que incidirían mucho a la salud, en la dinámica urbana y en entender que la ciudad no es capaz de soportar tanta carga vehicular.

Por eso, la gente no se anima a caminar, entonces al no hacerlo no se da cuenta que la ciudad está bombardeada, por eso, se preguntó "¿quién en su sano juicio se pone a caminar en las banquetas de cualquier zona, con toda la libertad, si las banquetas están bombardeadas con rampas?"

Además, dijo que, tienen un montón de deterioros, tienen demasiados problemas por el mal manejo de las áreas verdes, al no tener suficiente superficie para inmersión, entonces esas áreas verdes las destruyen el drenaje y el agua.

“No estamos siendo conscientes de ese espacio que debemos de garantizar para toda la comunidad y la banqueta como primer punto de encuentro de la calle y de ahí viene lo demás, la forma en que nos movemos a los distintos puntos y destinos”.