Las recomendaciones del Centro Nacional para la Prevención de Desastres (Cenapred) y la Secretaría de Gobernación federal indican mantener el radio de seguridad de 12 kilómetros, “por lo que la permanencia en esa área no está permitida”, pero además, las autoridades del país mantienen el tránsito controlado entre el municipio de Santiago Xalitzintla y San Pedro Nexapa, vía Paso de Cortés.
Sin embargo, en un recorrido encabezado por el director del Centro Universitario para la Prevención de Desastres Regionales (Cupreder) de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP), Aurelio Fernández Fuentes, se observó que no existe ningún reten que impida el acceso a la zona declarada de emergencia en los alrededores de “Don Goyo”, es decir, se puede llegar sin ningún problema a casi cuatro kilómetros del cráter del volcán, justo en la sede del parque nacional Izta-Popo.
En la visita, realizada el pasado viernes, los reporteros que acompañaron a los directivos del Cupreder detectaron la instalación de una base del Ejército mexicano en el lugar que se encarga de vigilar que las personas que visitan la zona no lleguen hasta el albergue ubicado en el mismo lugar, donde tienen instaladas cintas que prohíben el paso de los habitantes cercanos y de los visitantes.
Organizan esfuerzos autoridades federales
Durante el recorrido también se presentaron autoridades nacionales del Centro Nacional para la Prevención de Desastres (Cenapred) y de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), encabezadas por sus titulares, Enrique Guevara y Juan José Guerra Abud, respectivamente, quienes supervisaron las condiciones en que se encuentra la zona y reforzaron las actividades de prevención a favor de los ciudadanos y del cuidado del medio ambiente.
En ese contexto, el titular del Cenapred justificó que el radio de 12 kilómetros señalados como zona de alto riesgo es solamente una acción preventiva, porque según los registros de la dependencia a su cargo el alcance máximo de fragmentos emitidos por el volcán en los últimos años es de tres y hasta cuatro kilómetros, pero para garantizar la seguridad de los visitantes se determinó que fueran 12 kilómetros de cuidados en un radio preventivo.
Desde la perspectiva de Enrique Guevara, resulta casi imposible mantener en vigilancia el cien por ciento de los alrededores del volcán Popocatépetl, que tiene muchos caminos y veredas, por eso aclaró que resulta “imposible que en cada uno se pueda tener vigilancia en los accesos que hay, pero en Paso de Cortés sí se está vigilando y se ha hecho la recomendación necesaria, para evitar problemas entre los ciudadanos”.
Cabe mencionar que el objetivo de conocer el estatus que guarda en la actualidad, el área natural protegida del parque nacional Izta-Popo es para tomar medidas preventivas en esa zona, que tiene una superficie de 40 mil hectáreas y recibe alrededor de 85 mil personas al año, “por eso reforzamos permanentemente las acciones de vigilancia para garantizar la prevención y el cuidado de los espacios naturales que hay en la zona”.
Para Enrique Guevara, titular del Cenapred, resulta urgente y fundamental generar conciencia en los ciudadanos tanto los que habitan en regiones cercanas como a los visitantes, que no pueden caminar en las áreas cercanas del volcán Popocatépetl, porque en la actualidad se viven momentos de reserva en relación con el comportamiento del coloso.
Elementos naturales no se han perturbado
Por su parte, el encargado de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), Luis Fernando Fueyo McDonald, aseguró que la actividad del volcán en las últimas semanas dentro del polígono del parque nacional Izta-Popo no representa ninguna perturbación a los elementos naturales de la zona, por eso apuntó que las autoridades federales permanentemente custodian la flora y la fauna, pero además llevan a cabo trabajos coordinados para advertir a todos los visitantes que la actividad creciente del volcán obligó a las autoridades del país a elevar la alerta volcánica a semáforo amarillo fase 3.
Desde su perspectiva, personal de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales orienta cotidianamente a los visitantes que practican el alpinismo y que llegan a disfrutar la belleza natural de la región de los volcanes, “se les pide siempre que no se acerquen demasiado al volcán” porque es una forma de cuidar de la integridad personal de todos los visitantes.
Sobre el tema de salud pública, el titular de la Semarnat reveló que trabajan de manera coordinada con las autoridades locales de la zona y con el Instituto Nacional de Ecología, para llevar a cabo las mediciones de las erupciones volcánicas y de esa forma informar puntualmente a las autoridades de Salud y de Gobernación en qué lugares se incrementan los parámetros de medición reportados.
En zona sur del volcán denuncian abandono
Los investigadores del Cupreder aseguraron que durante los recorridos realizados por los alrededores del volcán Popocatépetl encontraron que los habitantes de la zona sur del coloso denuncian total abandono de parte de las autoridades gubernamentales del estado de Puebla, “sobre todo en la parte alta del municipio de Atlixco, Tochimilco, Cuilotepec y la Magdalena Yancuitlalpan, entre otros”.
A decir del director del Cupreder de la UAP, las autoridades estatales creen que hacer un mapa de riesgo es como replicar un compás y listo, por eso informan que están listos para evacuar a los habitantes de las tres comunidades más cercanas, cuando en realidad son ocho las poblaciones que deben ser consideradas de alto riesgo, “hay poblaciones donde no existe información y la gente está preocupada, sobre todo en la zona sur del volcán”.
Cuando hay erupciones, reveló el investigador del centro, Carlos Tovar González, no encuentran a ninguna autoridad, “por ejemplo ahora mismo estamos a ocho kilómetros del cráter y nadie dice nada”, cuando desde ese centro de la UAP encuentran unas 12 comunidades sin atención y que no reciben comunicados, “son unas 12 poblaciones, entre ellas Cuilotepec, Agrícola Ocotepec y la Magdalena Yancuitlalpan” que se encuentran dentro de la mancha de mayor peligro del mapa del Cenapred.
Desde el Cupreder los investigadores recomendaron poner mayor atención a las zonas sísmicas localizadas en el volcán Popocatépetl, porque aunque no se sabe hacia dónde se dirigirá la explosión actualmente, es preventivo mantener a los habitantes informados y saber lo que tienen que hacer en caso de una emergencia.
El especialista del centro, Vicente Velasco Valencia, ratificó durante el recorrido realizado el pasado viernes que en los alrededores del volcán Popocatépetl existen muy pocos señalamientos y esa carencia la señalaron las autoridades federales, que confirmaron que esa actividad está a cargo de los gobiernos de los estados que tienen colindancias con el coloso, “porque en el círculo de 12 kilómetros habitan unas cinco mil personas y es importante mantenerlas informadas”.
Advierte Cupreder de riesgos por lajar
Los investigadores del Cupreder advirtieron que así como está la situación del volcán no se descarta la posibilidad de que se presente un lajar, que es un río de lodo que alcanza hasta tres metros de altura al interior de la barranca de Huiloac, “uno de los peligros más fuertes de un volcán es un lajar, que baja de 20 a 30 kilómetros por hora”, aseguró Aurelio Fernández Fuentes, quien informó que un fenómeno como esos llega a las comunidades en un lapso hasta de 30 minutos.
El funcionario de la máxima casa de estudios del estado de Puebla recordó que aunque son tres estados que tienen colindancias con la zona volcánica, el cráter del volcán Popocatépetl está del lado de Puebla, por lo tanto se tienen que tomar medidas extremas en caso de presentarse una erupción, situación que está latente y existen amplias posibilidades de que se presente.