(foto) Las aulas de capacitación son utilizadas como bodegas.
La Secretaría de Salud se ha convertido en una auténtica “bomba de tiempo”. Los directivos de la dependencia morenovallista han agredido económicamente a los trabajadores de base y han pisoteado sus derechos constitucionales.
No conformes con los despidos masivos de personal de contrato, los jefes del área de Recursos Humanos de la Secretaria de Salud —Gerardo de la Fuente y su golpeador, Marco Matamoros— han emprendido acciones en contra de los médicos profesionales y enfermeras.
Médicos entrevistados por Intolerancia Diario —que pidieron el anonimato por temor a represalias— afirmaron que el encargado de Relaciones Laborales de la Secretaría de Salud dio la orden de retener indebidamente el pago quincenal a los galenos, “y giró indicaciones a los bancos para no hacer el depósito o el pago que corresponde”.
Esta medida —dijeron— es a todas luces anticonstitucional y viola la Ley Federal del Trabajo, y con ello se puede provocar un serio colapso de los servicios de salud, principalmente en unidades hospitalarias como Huejotzingo, Huauchinango, Teziutlán y el hospital general de Cholula, donde siete de los 11 médicos especialistas son afectados por esta barbarie burocrática que les exige documentación que acredite la especialidad que ejercen.
Las disposiciones que argumentan los jefes —dijeron— son posteriores a los años 1994 y 2001, “normas que no existían al momento de la creación de esos hospitales y, por tanto, al ingreso de estos galenos: hospital de Huejotzingo 1976 y Cholula 1986.
Los médicos especialistas recalcaron que no están fuera de norma, “el que está fuera de quicio es quien les exige algo que no estaba vigente al momento de su graduación y contratación.
”Además, la estrategia que viola derechos constitucionales requiere de la orden de un juez para poder retener un salario. Más claramente, es el caso del propietario de un auto Ford, modelo ‘T’ del año 1917 al que su dueño al intentar venderlo —es una pieza valiosa—, no puede hacerlo porque el comprador le exige las calcomanías de verificación vehicular de los años veinte del siglo pasado, requisito que entonces no existía. Pero ahí no para todo, los trabajadores de diversas áreas que cumplen puntualmente con su asistencia y elevada productividad son avalados por sus superiores inmediatos, que le dan derecho a premio, y una vez obtenido el premio ‘Estímulos a la puntualidad y productividad’, reciben el oficio correspondiente que acredita el premio, pero en la tarjeta bancaria de nómina no aparece el deposito correspondiente, los premios se otorgan bimensualmente y van dos bimestres que a los premiados se les responde que es por falta de fondos."
Los afectados aseguraron que sería muy interesante investigar todos estos fondos de salarios retenidos y de estímulos: ¿A las cuentas de qué funcionarios de Salud han ido a parar?
Definitivamente —afirmaron—, este tipo de acciones que matan, a escasas dos semanas de las elecciones, van a repercutir en votos de castigo en contra del exsecretario Aguilar Chedraui, ¿o será que tanto el jefe de Recursos Humanos como el de Relaciones Laborales pertenecen a un grupo que no apoya al exsecretario?
Otra más del morenovallismo
El Hospital General del Sur, conocido como Agua Santa, padece una situación caótica desde hace un par de meses por las obras de reconstrucción y ampliación que se están llevando a cabo con mucha prisa para una supuesta reinaguración ocho días antes de la jornada electoral.
Dicho hospital, que cuenta normalmente con cuatro vías de entrada —una directa al Hospital de la Mujer, la propia del hospital y el Centro de Especialidades, otra para trabajadores, y una más para servicios y vehículos, directa al estacionamiento—, debido a estas acciones toda el área hospitalaria cuenta con una sola vía de entrada para todos, inclusive para pacientes y familiares, pues, pese a la obra, las autoridades insisten en mantener los servicios abiertos y por ahí circulan motoconformadoras, trascabos, camiones materialistas y de la empresa constructora, y loa trabajadores, pacientes y familiares tienen que esquivar su arrollador paso.
Lo delicado es que desde ayer tienen alta prioridad los volteos y camiones de carga que tienen que transportar a toda prisa todo el escombro, desechos y basura generada por la obra, para dejar lista la escenografía de la supuesta inauguración.
El riesgo y molestias para quienes ahí acuden a trabajar o en busca de su salud es elevado, pero eso no importa, lo importante es el “teatro” que ahí se piensa montar.
