En el estado de Puebla, al menos 876 personas han muerto por COVID-19 en su casa o fuera de un hospital, más del 50% de ellas en los últimos tres meses, defunciones que se consideran ambulatorias.
Según las últimas estadísticas de la Dirección Nacional de Epidemiología, desde que inició a pandemia se han registrado 4 mil 996 muertes por la enfermedad que produce el coronavirus SARS-CoV-2.
De dicho total de defunciones, el 17 por ciento que implica cerca de 876 personas, han muerto afuera de un hospital, la mayoría de ellas en sus mismas viviendas.
Sin embargo, la ocupación hospitalaria apenas alcanzó hasta el 15 de noviembre un 22 por ciento y 16 por ciento en camas para pacientes que requieren ser intubados por su gravedad.
De los más de 876 fallecidos en casa, por lo menos 417 han muerto en los últimos tres meses, según un conteo realizado por Intolerancia Diario.
Las muertes podrían ser más, ya que desde la semana pasada la Secretaría de salud del estado, informó que ya se habían rebasado los 5 mil fallecimientos, cuando en la federación no se ha llegado a esa cifra.
La mayoría de las muertes ambulatorias se han registrado en pacientes entre 55 y 69 años de edad, aunque buena parte se registró en pacientes con más de 40 años.
Sin embargo se debe considerar que también jóvenes han muerto en casa, luego de que han muerto por COID-19 , al menos ocho personas entre 25 y 29 años de edad y 17 en el rango de 30 y 34 años.
Personal sanitario consultado afirma que los mexicanos esperan mucho tiempo para buscar atención médica y acuden cuando sus casos muy graves, que es imposible recuperarse.
Según los datos del gobierno federal, en todo el país más de 10 mil personas han muerto antes de ser ingresadas a un hospital y sucumben ante el virus durante su traslado en taxi o en la casa donde han convalecido.
No atenderse en un nosocomio, implica no solo puede propagar la enfermedad con familiares, sino que también oculta una cantidad incalculable de personas fallece sin haberse hecho las pruebas y no se contabilizan como víctima de la COVID-19, de acuerdo con los epidemiólogos.
“Es muy importante que la muerte no este contribuida por una atención tardía, (…) por favor, acudan tempranamente a los hospitales, sobre todo las personas que tienen mayor peligro”, exhortó el subsecretario de Salud, Hugo López-Gattel.
Muertes ambulatorias
Por ejemplo en cuanto a muertes fuera de hospitales, en la localidad de Ocotlán del municipio de Coronango, se en el mes de julio hubo al menos 40 entierros, cuando antes el promedio era de diez fallecimientos.
Daniel Guerrero, director de Salud del ayuntamiento de Coronango, confirmó que la gente no acude a hospitales que manejan covid, sino a médicos particulares.
“Eso nos complica el seguimiento de pacientes”, dijo al señalar que también hay casos no confirmados.
Las estadísticas arrojan que el rango entre 55 y 59 años de edad es el que más muertes fuera de hospitales se han presentado al registrar 70 fallecimientos.
Hace unos días el director de Salud Pública y Vigilancia Epidemiológica, José Fernando Huerta Romano, señaló que casi una cuarta parte de las personas fallecidas por coronavirus en Puebla eran amas de casa.
Las personas pudieron haber muerto en sus domicilios por diversas razones, como un fallecimiento súbito por complicación respiratoria o una falla multiorgánica.
Incluso pudieron morir quienes no tuvieron manera de llegar a un centro médico o no quisieron hacerlo o fueron enviados a casa por personal médico o quienes esperaban curarse solos.
“Va a haber un subregistro y en México va a ser particularmente grande”, estimó el epidemiólogo Alejandro Macías, quien fue comisionado para la prevención y control de la influenza AH1N1 segpun una publicación del 5oElemento.
“En el caso del covid-19, entre más pacientes hay muriendo fuera de los hospitales, más cuestionas la eficiencia de tu servicio médico”, agregó el especialista.