El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, al ordenar al nuevo sacerdote José Francisco Sampieri Aguilar, oró por más vocaciones religiosas, además de puntualizar el espíritu de servicio que deben tener los discípulos de Jesús en beneficio de las y los ciudadanos.
Recordó que con la imposición de las manos, acompañada con la oración Consecratoria, ha quedado configurado con Cristo Maestro, Pastor y Santificador; además han quedado consagrados al servicio de la Iglesia.
Desde la Basílica Catedral Metropolitana de la Angelópolis, acentuó que tuvieron una largo camino que recorrer por siete años para convertirse en servidores de Jesucristo y del pueblo.
Sánchez Espinosa refrendó que a este nuevo sacerdote que se integra al conjunto de sacerdotes de Puebla, corresponde privilegiar el trabajo social al interior de la primera célula de la comunidad, la familia.
"Al presbítero le corresponde, como colaborador del Obispo, santificar al Pueblo cristiano a través de la predicación de la palabra de Dios, la guía pastoral y la administración de los sacramentos, especialmente la Eucaristía, la reconciliación y la unción de los enfermos".
Insistió que los sacerdotes deben estar preparados para atender a los fieles durante el año y todos los años a donde se necesite