Como producto del trabajo y gestiones conjuntas entre la Secretaría de Desarrollo Rural (SDR) y productores y productoras acuícolas del estado, el Sistema Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) entregó siete certificaciones por Buenas Prácticas a granjas de trucha y tilapia.
Con estos reconocimientos, que fueron entregados al mismo número de Unidades de Producción Acuícolas, las que son responsables de la producción de 323 toneladas de pescado al año, se acredita que sus producto carecen de riesgos asociados a agentes físicos, químicos o biológicos que provoquen algún grado de contaminación.
La secretaria de Desarrollo Rural, Ana Laura Altamirano Pérez, destacó que desde el inicio de la administración se ha buscado la especialización y mejora constante de las y los pequeños productores.
Agregó que estas certificaciones ayudarán no sólo a entregar mejores productos, sino también a abrir canales de mercado que generarán mayores ingresos para las familias y una mejora en su calidad de vida.
Altamirano Pérez señaló que uno de los ejes del Plan Estatal de Desarrollo es la recuperación del campo poblano, que incluye apoyar a los productores acuícolas, para que este sector crezca en los próximos años.
La titular d ella SDR agradeció la disposición y trabajo de las Unidades de Producción Acuícolas que cumplieron con todos los requerimientos planteados tanto por Senasica como por la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) del gobierno federal.
Las unidades productoras de trucha que alcanzaron certificación son Xoulín, de Tianguismanalco; Presita San Lorenzo y Brecum, de Zacatlán; Truchas Ejecayan y Truchas La Esperanza, de Zacapoaxtla; San José Ojo de Agua de Tlahuapan y Las Parientes de Alta Luz de Ixcaquixtla; esta última es productora de tilapia.
Estas Buenas Prácticas Acuícolas y Pesqueras (BPAP) son un conjunto de procedimientos, actividades, condiciones y controles que están establecidos en las Normas Oficiales Mexicanas (NOMs), así como en otras disposiciones jurídicas que son aplicables desde el procesamiento primario hasta la puesta a disposición del consumidor, las cuales se alcanzaron gracias al acompañamiento del Comité Estatal de Sanidad Acuícola del Estado de Puebla (CESAPue).
De este modo, la trucha y tilapia producida en Puebla será un producto seguro para las y los consumidores con menores grados de contaminación, lo que disminuye las enfermedades y permite el acceso a un número de mercados más grandes.
Durante 2018, se reportó una producción acuícola de 4 mil 114.8 toneladas con especies como bagre, carpa, langosta y mojarra, así como trucha, con la cual Puebla es el segundo productor a nivel nacional.