Rumbo al cuarto informe de actividades del gobernador del estado de Puebla, Rafael Moreno Valle, su característica principal es mandar al diablo a las instituciones, aseguró el activista social Ricardo Jiménez Ávila.

Al actual mandatario poblano no le importa la división de poderes ni el Estado de Derecho, ni los elementos fundamentales contenidos en la Constitución, porque es un gobierno al servicio del gran capital, que se deslinda de sus responsabilidades de atender a los poblanos.

En los cuatro años de gobierno de Moreno Valle, agregó el activista poblano, se percibe una total falta de respeto a la vida institucional, lo que genera una completa descomposición del tejido social.

Por eso reveló que desde los grupos de la sociedad organizada prevalece una valoración lamentable de la forma de gobernar de Rafael Moreno Valle, “que conduce un Estado carente de democracia”.

Puebla tiene 48 meses sumergido en una tremenda crisis social, donde no existen políticas de gobierno que resuelvan el rezago existente en todos los rubros, lo que acrecienta los problemas sociales.

En Puebla no existe un mínimo respeto a la división de poderes, aseguró Jiménez Ávila, por eso existe una gran tarea de los poblanos por recuperar y reconstruir la vida democrática.

El problema de la administración estatal, dijo el activista, es que en el presente año electoral permite que sus trabajadores se promuevan para mantener los espacios de poder. “El ejemplo de ello es Mario Rincón González, titular de la SDRSOT y virtual candidato a una diputación federal”.

Los funcionarios del gobernador violentan la ley, solapados por su jefe, dijo, pero además permanentemente se desarrollan en la ilegalidad, al realizar una promoción ofensiva de su imagen, solamente por cumplir los caprichos del gobernador poblano.

El de Moreno Valle, aseguró Ricardo Jiménez Ávila, es un gobierno que descompone las mínimas normas de urbanidad y de civilidad social, pero tampoco respeta las leyes y, contrario a eso, trastoca los derechos humanos, privatiza y despoja de acuerdo a sus intereses.

En lo que insistirán los servidores públicos de la oposición y la mayoría de los grupos sociales del estado, agregó Jiménez Ávila, es en frenar a los gobernantes como Moreno Valle, que mantienen el atraso en la población.

Pero además se caracterizan por no respetar en lo más mínimo las garantías individuales en el estado de Puebla, por eso afirmó que la entidad lleva cuatro años de una disminución de la base laboral hasta de un 25 por ciento.

Rafael Moreno Valle es un gobernador que quiere acaparar todo en el estado y no permite que existan contrapesos en su gobierno, prueba de ello es que tiene el control sobre los sindicatos, pero además deja sin empleo a mucha gente, lo que genera condiciones de convivencia muy complicadas.

La meta de los grupos sociales opositores al actual régimen, aseguró, es frenar el gobierno nefasto que existe en la actualidad, pero que además sea juzgado, porque sus acciones se traducen en un total autoritarismo en detrimento de los habitantes del estado de Puebla.

El dato
El balance de los primeros cuatro años de gobierno del mandatario poblano, dijo el líder del Movimiento por la Alternativa Social, es que sale reprobado totalmente, porque no le encuentran que haya hecho algo bueno.