La cúpula nacional del PRI está bien pendeja si piensa que nos vamos a doblegar”, advirtió el candidato a diputado federal por el Revolucionario Institucional, Humberto Aguilar Viveros tras lamentar que el líder de la CTM en Puebla, Leobardo Soto, haya abonado el trabajo para privilegiar a su gremio en Ciudad Audi.

Aguilar Viveros, sumamente molesto, especificó que el desamparo de su líder nacional Enrique Ochoa hacía los candidatos poblanos da la impresión que están pactados acuerdos cupulares con otras fuerzas políticas para favorecer a la candidata de Por Puebla al Frente, Martha Erika Alonso Hidalgo.

El candidato exdelegado de la Conafor, parafraseó a su líder moral Ochoa Reza en una de sus visitas a Puebla, "así textual: acá en Puebla no estamos pendejos.  No nos vamos a dejar avasallar", dijo.

Acentuó que en Puebla “da la impresión que las campañas aún no comienzan ante el olvido de la cúpula priista”.

Aseguró que esos acuerdos “no están funcionando como se demostró en la gira de Ricardo Anaya en Tepeaca, en donde esperaban los aliancistas a cinco mil personas, pero a duras penas con el acarreo llegaron mil 500 supuestos simpatizantes”.

Reiteró que no se bajará de la candidatura ni abandonará las filas del partido de toda su vida porque ganará la contienda al panista Mario Rincón González.

Solicitó al árbitro electoral y autoridades competentes que investiguen de donde el diputado con licencia sacó siete millones de pesos para adquirir su residencia.

Además culpa directamente al secretario General de Gobierno, Diódoro Carrasco Altamirano, al Fiscal Víctor Carrancá, al encargado de Seguridad Pública, Jesús Morales y a la administración estatal, si le ocurre cualquier incidente a su familia, equipo de trabajo y a él durante la época electoral

Sobre su correligionario Leobardo Soto, destacó, que los intereses de la central obrera s superaron a los del PRI poblano por todos los espacios que ganó la CTM en una Ciudad Modelo que  funciona y por imponer candidatos en otras fuerzas electorales en otros municipios.