El gobernador, Miguel Barbosa, afirmó que Puebla es ejemplo a nivel nacional con respecto a la atención de personas privadas de su libertad y que enfermaron de Covid-19, pues desde el inicio de la pandemia, los reos fueron atendidos en el Centro de Internamiento Especializado para Adolescentes (CIEPA), que fue habilitado para atender de forma exclusiva a los enfermos.

“Puebla es ejemplo nacional en donde pusimos el único reclusorio Covid que hay en el país y que hemos mantenido un nivel de atención médica, de verdad, que lo agradecen los propios reclusos y sus familiares”, dijo.

Desde marzo de 2020 y hasta la fecha, el gobierno del estado ha invertido más de 3 mil millones de pesos para hacer frente a la pandemia, esto implicó no solo la reconversión de hospitales para atender a los pacientes Covid-19, pues también el CIEPA se puso a disposición de las personas privadas de su libertad y que resultaron contagiados.

El gobierno del estado, por medio de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal habilitó un espacio a un lado del penal de San Miguel, en un lugar anexo, para trasladar a los menores infractores, de esta forma quedó libre el CIEPA con los insumos médicos y sanitarios para atender a las personas quienes enfermaron del virus.

En el reporte que emitió la Secretaría de Gobernación (Segob), este lunes, solo hay una persona aislada en el CIEPA, quien se contagio de Covid-19, por lo que esta en vigilancia médica y atendida esperando su pronta recuperación.

Las acciones para las personas privadas de su libertad

El gobierno del estado, por medio de personal por la salud, ha realizado verificación en los Centros Penitenciarios de Puebla con el objeto de reducir los riesgos a exposición y el aseguramiento de medidas sanitarias, por ello es que se realizan supervisiones constantes en los diferentes centros para prevenir y atender a personas contagiadas del virus.

Desde el pasado 1 de junio, las visitas a las personas privadas de su libertad son forma escalonada, tiempos reducidos, sin comida ni objetos personales, como parte de las medidas sanitarias que se asumen en los Centros Penitenciarios para prevenir y evitar casos de Covid-19 entre los reos.

De acuerdo al último decreto emitido por el gobierno del estado se indica un aforo de 30 por ciento, pues, desde el año pasado la entidad se mantuvo en color rojo y se restringieron visitas a los penales, además de varias actividades.