En términos beisboleros, el PAN le leyó la jugada al PRI. La cooptación que el presidente Calderón hizo a la campaña de Josefina Vázquez Mota, no tenía otro objetivo más que recurrir al ataque y desprestigio del candidato Enrique Peña Nieto, para tratar de bajarlo de las preferencias electorales.
Tan clara era la estrategia del panismo, que los priistas tuvieron el tiempo suficiente para preparar con mucha anticipación el contraataque.
Para empezar, en el búnker tricolor se determinó que Peña Nieto no contestaría ningún ataque, que todos los dardos lanzados por los panistas los respondería el presidente nacional del Revolucionario Institucional, Pedro Joaquín Coldwell.
De tal forma que Peña Nieto mantendría su campaña de propuestas y no caería en el juego que buscan los estrategas blanquiazules. Y hasta ayer, las cosas para los tricolores son favorables.
Así que cuando los panistas quisieron sorprender al PRI con los anuncios de televisión donde acusan a Peña Nieto de no cumplir con sus compromisos firmados —cuando fue gobernador del Estado de México— la dirigencia nacional ya estaba preparada.
De ahí que la respuesta fue inmediata, sobre todo documentada, para dejar en ridículo a los del PAN.
Al instalarse la llamada “Mesa de la verdad”, a un lado del puente de la vialidad López Mateos —puente de Viga—, el líder del PRI señaló que ese era el lugar exacto del compromiso 127 que, en su momento, entregó el ahora candidato presidencial priista, Enrique Peña Nieto.
“Si los dirigentes de Acción Nacional consideran que es allá (en el distribuidor Reforma) el compromiso 127 que acrediten con pruebas, como nosotros lo estamos haciendo, que ese es el lugar”.
Ayer, los priistas se trasladaron hasta el distribuidor vial donde se encontraba el líder del PAN, Gustavo Enrique Madero, para invitarlo a dilucidar y aclarar la ubicación del compromiso notariado 127.
Joaquín Coldwell manifestó que a los panistas les molesta que Peña Nieto ofrezca eficiencia “porque si algo ha caracterizado a los últimos 12 años de gobierno es la ineficiencia para atender la ola de violencia en el país”.
De esta forma, el tricolor desactivó la estrategia de ataque sin disminuirle puntos a Peña Nieto.
Además, López Obrador logró acercarse a Vázquez Mota.
Los panistas deberían modificar su estrategia porque si continúan con la “guerra de lodo2, podría ser rebasado hasta por Andrés Manuel Obrador, que es un fuerte contendiente para imponerse en el debate del próximo 6 de mayo.