A esta redacción llegó una carta de agradecimiento por la publicación de los actos de corrupción en el Conalep. Por la importancia del hecho la reproducimos textualmente, guardando en el anonimato al autor de la misiva.
Señor Enrique Núñez:
No tengo palabras para agradecerle lo que ha hecho por nosotros, hemos pedido apoyo en otros periódicos y nadie nos apoyó, al contrario, nos iban a acusar con nuestros jefes, y corrían a los compañeros que pedían apoyo.
Somos ciudadanos que trabajamos duro día a día por la educación digna de nuestros hijos, y no es justo que “gente” como el Ing. Arq. Francisco de Padua y su “equipo” sólo vinieron a esta honorable institución a ver sus intereses económicos y no el beneficio de los alumnos, ellos no son “Servidores Públicos”, se supone que a eso vinieron: a servir a la sociedad, no a sangrarla con sus negocios personales. El colegio puede estar mucho mejor con esas salidas de dinero que hacen día a día.
Afortunadamente usted fue una de esas personas que nos ayudó a ventilar este acto de corrupción, esperamos favorablemente que las autoridades competentes los quiten y que nos dirija una persona que realmente quiera el bien para nuestro colegio y no sólo les vendan “espejtos” a la ciudadanía en cada informe de gobierno.
Señor Núñez, muy agradecidos con usted y que Dios lo bendiga y lo proteja.
Hasta aquí la cita.
Sólo esperamos que las autoridades correspondientes pongan orden.
Veremos y diremos.
Nada con el morenovalismo
El nerviosismo político del morenovallismo va en aumento. Ante la cercanía del Tianguis Turístico, las cosas no les están saliendo tan bien como lo planearon.
Para empezar, ahora no podrán presumir el teleférico, el viaducto Carlos Camacho está retrasado y, para terminarla de amolar, se desplomó una torre del puente vial.
Lo que sería una plataforma para que el Señor de Cerros brillara, se empieza a nublar, ya que el presidente Enrique Peña Nieto no quiere ningún testimonio gráfico que lo involucre con el morenovillismo, con el fin de evitar cualquier suspicacia ante los tiempos que se avecinan.
Quién diría que el morenovallismo iba estar contra las cuerdas.
Ver para creer.
Contracara