En la entrega pasada le comenté de todas las arbitrariedades y excesos que el presidente del presidente del Consejo de la Judicatura, Carlos Palafox, comete en aras de cumplir su sueño guajiro de ser candidato en 2024.
Bien, ahora le contaré que uno de los personajes que “asesoran” a Palafox Galeana es un viejo conocido y no precisamente por su buena reputación.
El Pepe Grillo que le habla al oído a Carlos Palafox no es otro que el impresentable morenovallista: Roberto Flores Toledano.
Sí, el mismo que como presidente del entonces Tribunal Superior de Justicia del Estado de Puebla, congelaba casos impidiendo la justicia y beneficiando al mejor postor o bien aceleraba aquellos chalecos que se fabricaban contra los enemigos del morenovallismo.
Flores Toledano y Carlos Palafox tienen otra similitud: ambos llegaron a presidir el Tribunal sin haber escrito una sentencia en su vida.
Los dos, también, son un invento de dos gobernadores, de Rafael Moreno Valle y de Luis Miguel Barbosa, respectivamente.
Con estos elementos, usted seguramente entenderá porque muchos de los abusos de Palafox tienen ese tufo tan morenovallista.
Encuentros y abrazos que engañan
Quienes quieran hacer análisis político tomando como base el estilo de Miguel Barbosa y equipararlo con Sergio Salomón cometerán un error garrafal.
Cuando alguien caía de la gracia del desaparecido gobernante, era linchado, acosado, defenestrado y nunca más volvía a ser visto ni escuchado por el señor de Casa Aguayo.
Con Sergio Salomón el estilo es muy diferente. No rompe, no lincha, no los hace blanco de su mañanera, pero cuando decide que te vas, te vas y punto.
Así lo hizo con los y las ex titulares de Comunicación, SEP, Movilidad y Transporte e Igualdad Sustantiva.
A todos los recibió, los invitó a giras y eventos, se tomó fotos con ellos y las subió a su Twitter, pero cuando decidió su salida, sólo les pidió su renuncia.
El ahora gobernador aplica aquella sabía frase que dicta: lo cortés no quita lo valiente.
Habrá que informarle al inexperto Carlos Palafox que ayer celebraba un tuit con el Ejecutivo, que el gobernador se llama Sergio Salomón. Y este gobernador no grita, no agrede, no amenaza, sólo actúa. Y todo a su tiempo.