Vaya manera en que la Secretaría de Seguridad Ciudadana encendió las alarmas, luego que el jueves un grupo de jóvenes que se manifestaban por mejores oportunidades laborales y de desarrollo, fueran agredidos por elementos estatales.
En lo que tiene toda la pinta de una represión a la “vieja escuela”, la manifestación fue “reventada” al detener a los líderes del movimiento bajo el presunto delito de cierre de calles.
Justo cuando el contingente reclamaba afuera del Palacio de Gobierno, trascendió que la orden para detener a los jóvenes provino de la Segob, luego que el grupo se negara a “dialogar”.
La escena lamentable de policías estatales “reduciendo” a los detenidos, exige respuestas inmediatas si esta será la política de “cero tolerancia” del gobierno estatal y del nuevo titular de la SSC, Raúl Ruiz García.
Es más, ¿no sería mejor aplicar la fuerza contra los verdaderos criminales?, porque tal vez el nuevo secretario no se ha enterado de la crisis de seguridad que tiene enfrente.
Seguro los detenidos son más peligrosos que asesinos, feminicidas, asaltantes, secuestradores, tratantes y pedófilos, y ésta sea la nueva realidad que espera a Tlaxcala. (LS)
Secture y la burla por seguridad
Tal parece que para la titular de la Secretaría de Turismo Estatal, Josefina Rodríguez Zamora, la tranquilidad de los tlaxcaltecas y sus visitantes es motivo de risa, al menos así lo dejó ver cuando fue cuestionada sobre las acciones conjuntas con la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
Y es que ante los hechos recientes de violencia en el estado, es urgente que todas las dependencias entiendan que desestimar de esa forma el cuidado de la sociedad es un mensaje nada alentador para quienes visitan al estado.
“Me da mucha risa cuando me preguntan eso”, fue la respuesta textual de la secretaria, y si bien quiso recomponer el camino y atender con seriedad el tema, lo cierto es que ya era tarde.
Sería bueno que los funcionarios de primer nivel entiendan el privilegio que da el poder para no soportar el clima de inseguridad que los “de a pie” enfrentan a diario.
Más aún, si la estrategia es atraer turismo, quienes llegan al estado, mínimo, esperan conocer si la seguridad está garantizada, y no es motivo de echarse una “risita” al aire. (LS)
Edgar Tlapale, al acecho del poder
Al fin parece que los agremiados al Sindicato “7 de Mayo”, cuyo líder, Edgar Tlapale Ramírez, fue recientemente destituido por los mismos integrantes del gremio, podrán ver la luz y decidir por su futuro.
Ya era hora para que los trabajadores le arrebataran el control a Edgar Tlapale Ramírez, conocido entre los agremiados por sus abusos y excesos.
Pues, si bien ya era jubilado evitó por todos lados bajarse del puesto y, de pasada, callar las voces que reclamaban sus actos.
Ahora, los sindicalizados tendrán que “cerrar filas” y evitar “filtraciones” de la dirigencia depuesta que, se cuenta, ya está operando una planilla oficial para intentar retomar el gremio.
¿Será que Edgar Tlapale Ramírez pueda burlar a la base trabajadora y “agandallar” el poder del Sindicato “7 de Mayo”, como acostumbra?
Al tiempo. (LS)