Familiares y amigos con fotografías de víctimas de la violencia, sacerdotes asesinados y personas desaparecidas se unieron en oración en la misa dominical realizada en Catedral.

El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, pidió por el descanso eterno de todas las personas que han perdido la vida bajo circunstancias violentas en la entidad y en el resto de México.

En estas jornadas por la paz, algunos fieles también vestían playeras de sus seres queridos como la pareja desaparecida en el mercado La Cuchilla, Jocelin Carreto y David Báez.

Otro caso fue el de Cristóbal Jafeth Serrano Cosme, joven de 14 años, de quien se desconoce su paradero desde el 3 de julio en el municipio de Amozoc.

Sánchez Espinosa reprobó que la violencia continúe apoderándose de diferentes áreas del territorio nacional llevándose a inocentes.

En dicha miisa, familiares y amigos de las víctimas refrendaron su fe y coincidieron en que únicamente quieren conocer alguna información sobre ellos..

“Le pedimos a Dios nuestro señor por sus familias; nuestras familias sufren la muerte violenta de nuestros seres queridos, cada día hay notícias de muertes”.

Desde la Basílica Catedral Metropolitana, Víctor Sánchez Espinosa realizó varias oraciones por el descanso eterno de quienes murieron en medio del clima de violencia e inseguridad que se presenta en territorio nacional.

“Le pido a Dios, por todas estas familias que están sufriendo por lo que está viviendo nuestro país; que Dios a estos hermanos los tenga gozando de su presencia y que a estas familias les de la paz y el consuelo, tenemos que seguir pidiendo por la paz en nuestra patria”.

Además de la participación en la jornada de oración por la justicia y la reconciliación en México nombrada Seamos constructores de la paz, más de 600 sacerdotes, diocesanos, religiosos y religiosas, acompañados por miles de fieles en la Arquidiócesis de Puebla.

Religiosos y laicos se han unido a la jornada de oración por la paz que fue convocada la por la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) el pasado 5 de julio ante la violencia que se vive en territorio nacional.

“Estamos viviendo tiempos difíciles, de inseguridad, de violencia, nosotros debemos dejarnos iluminar por la palabra que Jesús nos da y dar paso a la acción, nosotros tenemos que ser mensajeros de paz; no es fácil ante tanto sufrimiento de nuestras familias que ven desaparecidos a sus hijos, que ven muertos a sus hijos, no es fácil desde el punto de vista humano, pero su dolor, su sufrimiento tiene que abonar para que reine la paz en nuestra patria, para que reine la paz en nuestras familias, para que reine la paz en nuestra sociedad”, subrayó.

Insistió en no dejar de pedir por la paz en nuestra patria en nuestros estados, ciudades y hogares.

Por otro lado, anunció que, en los templos, el próximo domingo 31 de julio, los sacerdotes, religiosos y religiosas, además los fieles, pedirán a Dios por los victimarios, se realizarán oraciones por sus vidas y por la conversión de sus corazones.

Tras la doble ejecución de los sacerdotes Javier Campos “El Gallo” y Joaquín Mora; además del guía turístico Pedro Palma, en Cerocahui, Chihuahua, el pasado 22 de junio, la Arquidiócesis de Puebla se unió al llamado de un alto a la violencia y a la campaña de oración permanente por la paz.