El Congreso recibió las voces de activistas de los derechos sexuales y reproductivos que demandaron la aprobación de la “ley Agnes”, legislación en contra de la discriminación por razones de identidad sexogenérica.

Las palabras de Adán Cuamatzin resumieron el panorama político de la lucha por el reconocimiento de derechos.

“No hacer nada es otra forma de discriminar. Es perpetuar el estado de las cosas”, resaltó Cuamatzin.

Tuvieron que pasar tres legislaturas, seis años y tres asesinatos para que se aprobara una ley contra la discriminación.

Cuamatzin, representante del Comité Orgullo Puebla, pidió un viraje en las políticas públicas para el estado de Puebla, para que se atienda a las personas: “No pedimos nada imposible. Sólo que prioricen a las personas y sus realidades y sus derechos por sobre el dinero, el asfalto, los puentes, las telenovelas y el turismo. Sin las personas todo eso no tendría sentido”.

Durante el foro contra la homofobia, Adán Cuamatzin recordó la indolencia del Congreso del estado de Puebla y de las autoridades. 

El orador recordó que el Congreso local se tardó seis años para aprobar una ley en contra de la discriminación.

Y que no fue sino hasta que se presentaron tres asesinatos de personas de la comunidad LGBTTTI cuando se mandó al órgano legislativo, en carácter de urgente y de manera reactiva, una iniciativa de ley contra la discriminación.

Cuamatzin resaltó la actividad en contra de la discriminación de la activista Agnes Torres, asesinada el 10 de marzo del 2012. 

Por primera vez, un secretario de Gobierno acudió al Congreso para atestiguar el reclamo y la postura de los colectivos LGBTTTI.

Luis Maldonado Venegas, secretario de Gobierno, respondió: “Ofrezco que desde la perspectiva de gobierno podamos revisar una agenda de trabajo (…) y dentro de los programas de prevención de la violencia y del delito que están bajo la responsabilidad de mi secretaría, ofrezco que podamos sentarnos a dialogar”.

El secretario de Gobierno planteó: “Si no nos escuchamos, si no debatimos, si no lo hacemos con respeto a la pluralidad difícilmente vamos a encontrar cauces de entendimiento. Y aun cuando logremos reformas legales y constitucionales muy avanzadas, culturalmente vamos a seguir simulando realidades como las que hoy enfrenta la violencia de género; fenómenos que degradan el papel de una sociedad verdaderamente democrática”.

Por otro lado, el consejero de la Junta de Gobierno del Consejo para Prevenir la Discriminación del Distrito Federal, Luis Antonio Torres, sugirió que Puebla cuente con un consejo para prevenir la discriminación siguiendo el ejemplo del DF. 

Al foro realizado en el Congreso local asistieron legisladores como Socorro Quezada Tiempo y también funcionarios como Luis Maldonado Venegas, secretario de Gobierno; ambos militantes del PRD.

En el foro participaron activistas como Marco Antonio Moreno Rosado, de Observatorio Ciudadano de Derechos Sexuales y Reproductivos AC; Juan Alberto Corona Román, de No Dejarse es Incluirse, AC; Gloria Hazel Davenport Fentanes, presidenta de Humana, Nación Trans; Onán Vázquez Chávez, Presidente de No Dejarse es Incluirse, AC; Luis Antonio Torres Osorno, representante del Copred, y Alberto Téllez Rivera, coordinador del Colectivo Transexual del Estado

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Por parte del Comité Orgullo Puebla, Adán Cuamatzin recordó la figura de Agnes Torres Hernández: “La discriminación empieza por la boca, decía nuestra querida Agnes Torres Hernández. Pero puede continuar por el silencio. Por la inacción, por la indolencia. Por la omisión. No hacer nada es otra forma de discriminar: perpetuar el estado de las cosas que violentan a las y los ciudadanos”.

Cuamatzin citó la indiferencia de los gobernantes: “Como cuando Ronald Reagan no dijo nada sobre el Sida durante años. Hasta que su amigo Rock Hudson murió.

”Como cuando en este mismo recinto se abstuvieron de votar una ley contra la discriminación durante seis años y tres iniciativas y tres legislaturas, hasta que en un fin de semana mataron a 3 personas de la población LGBTTTI. El silencio dice mucho”.

Cuamatzin expuso que el caso del asesinato de la activista transgénero Agnes Torres no está clausurado y que Agnes Hernández levantó la voz siempre que se enfrentó a la discriminación: 

“Su caso no está cerrado. Un asesino está suelto”.

Los diputados y los funcionarios gubernamentales seguían las palabras de Cuamatzin.

“Dos asesinos no tienen sentencia aún. Y en la agenda que le presentamos al secretario general de Gobierno hay un punto clave pendiente: la política pública de prevención. Porque no todo se resuelve en el ministerio público. Porque la violencia de género también implica a la homofobia, implica la transfobia, la lesbofobia, la bifobia. Y de eso no se habla. Pero existe. ¿Cuánto dinero, cuántos programas, cuántos recursos humanos se invierten en garantizar una política de prevención que esté a la altura de las circunstancias?

”¿Cuál es el diagnóstico que se ha hecho en cuanto a la discriminación homófoba en Puebla y cuáles son las acciones que transformarán esa realidad? Muchas preguntas traemos hoy. Muchas preguntas que hacemos cada año. Cada año hay una reunión y muy buena voluntad. Cada año, pacientes, escuchamos. Y así hemos caminado: escuchando palabras y silencios. Pero eso no nos ha detenido”.

Cuamatzin reprochó la inactividad gubernamental y legislativa: “Tampoco los cuchillos, las balas, los golpes, los separos, las amenazas, las burlas, los despidos, la segregación, la falta de un documento de identidad, las humillaciones, los chistes en la televisión, los abusos policiacos, las extorsiones de la autoridad, el trato diferenciado en los servicios de salud, la incomprensión, ni el silencio. Ni la muerte. Como dijo Conchita Wurst al ganar Eurovisión: somos imparables. Y aquí estamos, escuchando y caminando.

A eso venimos. Y a proponer. A decir que la iniciativa por la que Agnes luchó debe ser aprobada en esta Legislatura para que las cosas sean un poco menos malas para los y las compañeras trans. Porque se la deben, a cada una de las personas trans que no tienen acceso a la educación, a un empleo a un hospital por no contar con un documento de identidad que diga su nombre y su género decididos”.

Cuamatzin finalizó: “Porque nadie tiene el derecho a ser indocumentado en su tierra. ‘Puebla frente a la discriminación por homofobia’ se llama este foro. Que sirva, pues, para romper el silencio de quienes pudiendo hacer no hacen y para que quienes dicen que harán, realmente hagan y cumplan su palabra. No pedimos nada imposible. Sólo que prioricen a las personas y sus realidades y sus derechos por sobre el dinero, el asfalto, los puentes, las telenovelas y el turismo. Sin las personas todo eso no tendría sentido. Denle sentido. Está en sus manos”.