El gobernador Miguel Barbosa Huerta, informó que su administración presentó denuncias por negligencia médica ante las Fiscalías General de la República (FGR) y del Estado (FGE) para que se investigue y en su caso sancione al o los responsables de la negligencia médica del bebé Lazarito, a quienes dieron por muerto al nacer pero en realidad estaba con vida, hecho que ocurrió en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS); a su vez, informó que la pequeña Yaz, internada en la Margarita por violencia familiar no quiso ver a su madre, quien por medio de una carta pidió la intervención del Gobierno del Estado.

En conferencia de prensa, el mandatario local se refirió al bebé Lazarito, a quien médicos del IMSS dieron por muerto, pues nació a las 23 semanas, dijo que más allá de ser un hecho registrado en el IMSS ocurrió en puebla y su gobierno tiene que intervenir.

“Respecto al bebé que fue declarado muerto y después se encontró que estaba vivo es un asunto del IMSS, nosotros a pesar de eso a través de la dirección jurídica presentamos denuncias penales ante la FGE y ante la delegación de la FGR para que se investiguen los hechos y se determinen responsabilidades y se determinen si hay negligencia médica o todas las faltas que pudieran incurrir y es nuestro papel, no vamos a dejar que eso se quede sin sanción, son hechos que ocurrieron en puebla, más allá de que se haya dado un hecho en el IMSS”, dijo.

Por otra parte, con respecto a la pequeña Yatziri, quien sufrió violencia familiar y abuso sexual por parte de uno de sus tíos, el mandatario local dijo que en respuesta a una carta que la mamá de la pequeña le envió se gestionó una visita; sin embargo, la menor no quiso ver a su mamá, incluso manifestó alteraciones nerviosas.

“El día de ayer, después de gestiones que se llevaron a cabo de parte de la madre de Yatziri, se determinó una visita de cuatro horas para poder desahogar esa visita pero los médicos y la Fiscalía con psicólogos advirtieron de algunos problemas, cuando le avisaron a Yatziri que su mamá iba a verla no quiso recibirla, tuvo reacciones de alteración de muchas de sus síntomas, frecuencia cardiaca y rechazo recibirla, pero de parte del gobierno cumplimos la palabra de gestionar esa visita que estaba siendo solicitada por la madre y por familiares y por interesadas en apoyar esta causa”, dijo el gobernador.

En su intervención, el secretario de salud, José Antonio Martínez García, informó que la niña de siete años de edad, quien sufrió violencia familiar, lo que le provocó intervenciones quirúrgicas sigue grave de salud y por el momento lleva una dieta especial, de acuerdo al reporte de quienes la atienden en el IMSS.