Un recuerdo a mi hermano Salomón Jauli
El primer triatlón en Puebla se llevó a cabo en 1986, la mirada de los amantes del deporte extremo que apenas iniciaba su auge se concentraron en Puebla, pocos participantes estaban preparados para un reto de esa magnitud, que a pesar de que representaría en nado la mitad de la distancia de una competencia Ironman Internacional, no dejaba de ser un enorme reto para el cual se requiere no sólo la preparación física, sino mental.
Fue el visionario Salomón Jauli Dávila, quien siendo gerente de Banco Internacional a principios de los años ochenta, organizó el primer Maratón en Puebla, promoviendo el atletismo urbano para que participaran miles de poblanos.
Pero el sueño de Jauli Dávila, hombre entusiasta, con gran calidad humana, fue más allá. Organizó el primer Triatlón en Puebla, buscó en ese momento traer a los mejores competidores, y que se hiciera posible que los poblanos se dieran cuenta que se podía vencer la resistencia.
El lugar elegido fue la Laguna de Alchichica, cuerpo de agua formado en los límites de Puebla y Veracruz, que pocos saben es un cráter de volcán.
Hay que recordar que hay tres tipos de formaciones volcánicas, de domo donde únicamente se forma el montículo sin la salida de material, los de domo y cráter, de los cuales tenemos dos ejemplos muy cercanos que son del Popocatépetl, así como el Citlaltépetl, la cumbre más alta de México, y los de cráter, dónde sólo hubo una explosión sin la formación del domo, y es el caso de Alchichica.
Estos cuerpos de agua que se consideran maravillas naturales, son conocidas también como axalapascos, enormes cuerpos de agua de varios kilómetros de diámetro que se forman en las montañas volcánicas de cima plana, tras las explosiones de material ígneo y la erosión natural de los cráteres.
La Laguna de Alchichica, cuya belleza y extraña naturaleza incluso cautivó al explorador francés Jacques Cousteau. Según cuentan los lugareños, entre sus límpidas aguas se esconde un secreto muy perturbador, y las leyendas abundan, entre ellas la presencia de una sirena, que los competidores en los diferentes triatlones no han visto.
Ese cuerpo se agua se ubica en la junta auxiliar de San José Alchichica, perteneciente al municipio de Tepeyahualco, cerca de Perote, a una altitud de 2345 metros sobre el nivel del mar, y una superficie de mil 81metros cuadrados de agua.
Y es ahí en un volcán donde Salomón Jauli, en 1986, decidió organizar el triatlón, en las aguas fría por la altura en que se encuentra, al ser tal vez el más cercano a la ciudad de Puebla.
Una de las características de éste cuerpo de agua es el alto grado de salinidad y altas concentraciones de magnesio, lo que le da un sabor para quienes por accidente la hemos probado, un sabor a leche de magnesia.
El recorrido fue nadar 1.9 kilómetros, la mitad de la distancia, recorrido en bicicleta hasta Puebla, con más de 50 kilómetros, y se vio el apoyo de los poblanos.
El primer ganador del triatlón fue Ivar Sisniega, mexicano por adopción pues nació en mayo de 1958 en Kenosha, Wisconsin, Estados Unidos. Estudió Economía en la Universidad de Stanford y Administración de Empresas en la Universidad de Arizona, donde se graduó con Summa Cum Laude.
Participó en el pentatlón moderno representando a México en tres Juegos Olímpicos. En los Ángeles 1984, donde fue abanderado de su país, logró el quinto y séptimo lugar. En Seúl 88, en tanto obtuvo el octavo puesto. Uno de sus máximos logros fue, sin duda, el conseguido en Moscú 1980, donde batió el récord olímpico y mundial de los 300 metros de natación. Además, compitió internacionalmente representando a México en esgrima y triatlón.
Así, Puebla se iniciaba como sede de triatlones, donde la fuerza de la mente y el cuerpo deben estar presentes en cada competidor.