Después de que las puertas y ventanas del Congreso del Estado se encuentran protegidas con tablas para evitar posibles daños, durante la manifestación de este miércoles, por parte de colectivos proaborto, hay quienes señalan que se está cuidando a los diputados.

Dicha cuestión es incorrecta, pues olvidan que hace un año incendiaron la puerta principal y destruyeron el automóvil de una trabajadora de la salud.

La marcha es legítima, pero los grupos radicales no faltan, y las que piden no violentarlas agreden a mujeres que piensan diferente.

Ojalá esta vez sea distinto. (FSN)

Sigue la campaña de Mier

Es un hecho que Ignacio Mier Velazco sigue en campaña, y para ello ocupa cualquier evento público al que asiste.

Un ejemplo de ello fue el informe de la diputada local por el distrito de San Martín Texmelucan, Angélica Cervantes González, al que se presentó para ser el primer orador del evento y después despedirse, sin escuchar las palabras de la legisladora.

Eso sí, antes de terminar, el coordinador de la bancada federal de Morena recibió algunos gritos de ¡gobernador!

¿Son estos actos anticipados de campaña? (GGJ)

Piden salida de María Luisa Juárez

Aunque en el plantel de la Universidad Tecnológica de Tecamachalco, las protestas son aplacadas, los alumnos decidieron acudir al Martes Ciudadano del gobierno estatal y exigieron la salida de la rectora María Luisa Juárez Hernández, por negligencia y abuso de autoridad.

Según cuentan, existen despidos injustificados de profesores, así como malos tratos y acoso laboral

Las amenazas de despido son por no tener la misma ideología política de la rectora, quien apoya al partido Morena. (SVC)

El saludo incómodo

Dicen que muchos ya están rehuyendo saludar en público al diputado federal Ignacio Mier Velazco o a alguien cercano a él.

Y esto, no por mala educación u otro tema, sino porque su grupo aprovecha para decir que lo están apoyando.

Dicen, ya son al menos dos políticos que platican ya sea directamente con el legislador o con algún allegado o allegada, y salen raspados por el rumor esparcido de que lo apoyan con miras al 2024.

Así que ahora ya muchos hasta el saludo le corren. Y no porque lo apoyen o no, sino porque lo utilizan y eso, aseguran, no se vale. (JC)