El gobierno de Puebla no tarda en anunciar una importante inversión -en Euros-, para poder hacer frente al crimen organizado y a cualquier "bicho raro" que se le ocurra cometer delitos en Puebla.
La inversión que estaría a punto de concretarse, una vez que los chinos firmen el convenio, es más importante que la Ruedota de la Fortuna, el teleférico y el pago de facturas rumbo a una presidencia municipal.
El hecho es que el gobernador en una de sus múltiples giras a China adquirió un buti de teléfonos celulares con la aplicación de Pikachu, para poder cazar monstruos, que en este caso serían delincuentes.
Solo basta que estos equipos sean programados para buscar “malandros” y eso es todo.
La Fiscalía General del Estado (FGE), no se va a dar abasto con tanto detenido, aunque va a ser necesario que sea contratado un técnico que clasifique a los malhechores y que diseñe una esfera lo suficientemente fuerte e incorruptible para que no se puedan escapar.
Ya el gobierno de Puebla dio los primeros pasos para esta nueva lucha y sin tregua contra la mafia.
El primer paso fue la recuperación de Darth Vader, de la famosa saga de Star Wars, y no cualquier máscara, la original, y ahora acaba de recuperar pedazos de una bicicleta de colección que fue robada de una casa-habitación.
Y todo mediante el chequeo de Facebook y de otras redes sociales.
Imagine el lector cuando estos celulares, los comprados en China, sean entregados como "arma de cargo" a los elementos de la Agencia Estatal de Investigación (AEI).
No mano, no, la tenemos ganada.
Dos meses de una masacre y nada
Solo pasa en el gobierno de Puebla, el 9 de agosto se cumplieron dos meses de la ejecución de 11 integrantes de una familia originaria y vecina del municipio de Coxcatlán y hasta
el momento los responsables, tanto intelectuales como materiales, no ha sido detenidos.
Cinco mujeres, 4 hombres y 2 menores fueron ejecutados con disparos de armas de asalto cuando se encontraban durmiendo dentro de su domicilio en la colonia San José El Mirador; sus cuerpos aparecieron la mañana del 9 de junio.
El artero crimen no alcanzó a conmover a los poblanos por múltiples razones.
La primera, el ocultamiento y manejo a su antojo de la información, que no permitió que la masacre trascendiera más allá de las fronteras de Coxcatlán y la segunda, que va de la mano con la primera, que "enfriaron la información", adelantando el boletín, donde implicaban a los asesinados con un drama pasional, dejando atrás un hecho muy importante y que tiene que ver con la pérdida de vidas humanas.
En otros estados este tipo de homicidios es motivo de protestas, de análisis por el incremento de la delincuencia, han costado las "cabezas" de servidores públicos, aquí en Puebla no paso nada.
Las estructuras del gobierno, definitivamente cómplices de la delincuencia que agobia a los poblanos, sirvieron para que el hecho fuera silenciado.
Nada más bastó que dejaran correr el rumor de la detención de un implicado, Carlos N., de 20 años de edad, detenido en la colonia El Potrero, para que hicieran creer a los poblanos que el caso estaba resuelto.
Pero este rumor ni siquiera fue oficializado.
Vicente López de la Vera, presidente municipal de Coxcatlán, se tendió como tapete al gobierno para colocar una cortina de humo en el caso y mandarlo al olvido.
Pero Coxcatlán no olvida.
Comandante en pelotas
Circula en redes sociales, como una queja presentada por elementos del sector 4 de la Policía Municipal, un video donde aparece parte de un cuerpo obeso y desnudo de un hombre que alegremente se pasea por los pasillos de este sector y que ha sido identificado como comandante Ángel García, quien es jefe de las juntas auxiliares de este grupo.
La queja es porque el servidor público anda totalmente desnudo en oficinas donde también hay mujeres.
Qué lástima que sea la SSPTM donde más escándalos de estos tipos existen.
La mujer policía en una felación, el director de Tránsito, ebrio.
¿Y la disciplina?
Nos vemos cuando nos veamos.