El 12 de junio de 2016 un camión nodriza de la empresa Transportes Cuauhtémoc atropelló a por lo menos 11 peregrinos que, en bicicleta, se dirigían de la Ciudad de México a San Antonio Xicotenco, en Veracruz, dejando como saldo 2 mujeres muertas y 8 lesionados, entre éstos un menor de edad.
Los hechos ocurrieron en la autopista Puebla-Veracruz, en el entronque del municipio de Tepeaca.
El responsable fue el conductor del camión nodriza, quien quedó detenido, aunque en el percance también participó un tráiler.
Las occisas fueron identificadas con los nombres de Jaqueline Medina y Marina Rojas.
Los heridos fueron trasladados a diversos hospitales, entre éstos el del Niño Poblano, donde quedó internado el menor.
La empresa Transportes Cuauhtémoc, que tiene su domicilio en Apodaca, Nuevo León, tiene contratada a la aseguradora AXA para este tipo de accidentes y los ajustadores de ésta no se dejaron esperar, llegaron de inmediato con los familiares de los fallecidos y de los heridos para asegurarles, jurarles que se iban a hacer cargo de todos los gastos.
Solo les pidieron que otorgaran el perdón y que todo iba a "correr por su cuenta".
Le comento a usted que cuando ocurren este tipo de accidentes existen dos tipos de víctimas, los afectados directamente y sus familiares, que tienen que correr para conseguir dinero, además de la desesperación de perder a un pariente y de tener a otros hospitalizados.
Con esto le digo que las familias firmaron, otorgaron el perdón, pero con la condición de que fueran pagadas las curaciones, los gastos funerarios y las indemnizaciones de las víctimas.
Pero no fue así.
A más de 4 meses de haber ocurrido los hechos, la aseguradora AXA brilla por su ausencia para cumplir el convenio.
Nada más del Hospital del Niño Poblano, la atención médica del menor que resultó con lesiones de consideración no ha querido ser pagada y ya suman 500 mil pesos.
La aseguradora oculta su falta de palabra bajo el argumento de que "están esperando que llegue el dictamen médico".
Y la Fiscalía General del Estado (FGE), también brilla por su ausencia.
No hubo sanción a la empresa Transportes Cuauhtémoc.
Le comento que los camiones de doble remolque se supone que están prohibidos por la Normativa Internacional de Derecho Aplicable.
Pero todos se hacen de la vista gorda porque representan ingresos al fisco.
Lo que pase después no les interesa.
Todos los accidentes donde han participado camiones de doble remolque han ocurrido debido a que por su excesivo peso el conductor no puede frenar.
Pero la empresa de transportes no tuvo ninguna sanción, por lo menos legal.
Las investigaciones de este caso quedaron entre la FGE y la aseguradora AXA.
Usted se debe imaginar...
Así las cosas, la aseguradora AXA sigue sin pagar.
Entre los lesionados existen quienes quedaron imposibilitados para trabajar.
Que, ¿esto no es un delito?
En la próxima entrega le voy a comentar la limosna que AXA ofrece pagar.
Nos vemos cuando nos veamos.