Antes de que se cumpliera el primer mes del violento operativo en Chalchihuapan, Víctor Carrancá, el entonces procurador ya había cambiado de bando.

Traicionando su responsabilidad social, el ex procurador decidió mantenerse del lado de Rafael Moreno Valle e incluso poner al servicio del ex mandatario la procuraduría del estado para exonerar al exgobernador y a los mandos policiales pese a la muerte de un menor y las lesiones graves que sufrieron una decena de pobladores el 9 de julio de 2014.

En la entrega del 5 de agosto de 2014 de esta columna, titulada “El servilismo del Procurador” cuestioné las actitudes de Carrancá Bourguet y conviene retomarla en el contexto actual, cuando se reabrió el Caso Chalchihuapan y se ha dicho que ahora sí habrá una investigación exhaustiva para castigar a los responsables del fallido operativo.

“En esa lógica, yo me pregunto en dónde diablos se perdió el procurador general de Justicia del estado de Puebla, Víctor Carrancá, cuando decidió asumir la postura de defensor jurídico del gobernador, en lugar de velar por proteger los intereses de los poblanos.

“Para nadie es un secreto que Carrancá ha asumido las funciones de defensor y vocero, en lugar de proteger —como la ley lo obliga— los intereses de quienes resultaron afectados por los actos de represión en Chalchihuapan…

“Desde el punto que se le vea, lo de Víctor Carrancá es un acto flagrante de traición, el cual debe ser estudiado también por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y dejar sin efectos todas y cada una de sus actuaciones en esta investigación”.

Como lo expuse anoche durante el programa “Destrozando la Noticia”, si realmente hay voluntad política para reabrir la investigación, tanto Facundo Rosas como Víctor Carrancá deben ser los primeros en declarar y no sólo por su buena voluntad como intentó disfrazarlo el ex fiscal con el tuit que lanzó recientemente y en el cual asegura que: “En relación con lo que se ha difundido y la denuncia presentada por la Sra Elia Tamayo, estoy a disposición de la @FiscaliaPuebla para realizar cualquier aclaración respecto de las hipótesis, lineas de investigación y diligencias desahogadas en la investigación de los hechos (sic.)”

Como lo señalamos en Intolerancia Diario desde hace seis años y como lo han retomado recientemente otros medios como 24 horas, la orden girada en el operativo era definitiva, sin cuidar protocolos de acción ni proteger los derechos humanos de los manifestantes.

Por ese actuar sin duda puede y debe ser sancionado Facundo Rosas, pero no es el único caso que se le debe investigar.

Ambos personajes, que como ya hemos dicho, tomaron clases con Genaro García Luna, suman un enorme expediente por omisiones y excesos cometidos durante el morenovallismo, así que reiteró, si de verdad se busca impartir justicia, existen muchos elementos para llamar a juicio y poner tras las rejas a dos de los personajes más oscuros de esa época.