¡En Aguascalientes les ha nacido un nuevo amor, es de Sevilla y se llama Morante! El de la Puebla del Río ha convertido la plaza Monumental en un verdadero manicomio.
La gente que llenó el coso se catapuelteaba, era puesta de pie al término de cada uno de los lances de capote en esa versión, tan personalisíma que tiene del lance a la "verónica"; sus muy morantinos remates y sus interminables pases de muleta, que al fin, en algún momento terminan, yo preguntaba a mis vecinos de localidad, si ya había terminado el muletazo o aún perduraba...
Lo que de seguro y por siempre permanecerá en la mente de quienes ahí estuvimos es la eternidad, el tiempo detenido en los vuelos del capote o de la muleta.
Pero, antes: por 2 veces 2 los ojos de Eulalio López " Zotoluco" se llenaron de lágrimas; la primera al salir de una tanda de derechazos, bien muy bien rematados, cuando el Matador que esa tarde se despedía de la afición, la plaza y la feria de la ciudad de la gente buena; se dirigió al centro del albero.
Y la segunda, cuando en evidente momento de gran emoción en el mismo centro del ruedo, en un abrazo estrecho, simbólico, se fundió con el público, la afición que le aclamaba gritando: ¡Torero...torero! Esto después de triunfal vuelta al ruedo tras obtención de una oreja, vuelta en la que el dominador común fue el manifiesto cariño del público.
El otro momento de gran emoción de la tarde vino después; al terminar la faena del segundo de Morante que con su toreo ya había convencido al respetable; vinieron, el pinchazo hondo, primero, seguido de las fallas con el descabello, y se escuchó el primer aviso desde el palco del juez.
Después, una vez que el de La Puebla había entrado por la tonera al callejón, éste torero en un gesto de humildad y honestidad extrema, que también la tiene, se negó a salir al tercio ante un reclamo insistente a base de aplausos que solicitaban su presencia.
Desde dentro del callejón tras el burladero de matadores se limitó a juntar las palmas de las manos y así en actitud de rezo, inclinado agradeció la ovación.
Lo sorprendente vino durante la lidia del sexto, segundo del lote de Diego Silveti que recién había salido de la enfermería por arrollón de su primero al recibirlo a portagallola.
Aprovechó Morante una pausa de la lidia, y vistiendo soberbiamente un terno principesco de color negro y muy reclamado en brillante aurus; el cabello recién cortado, frescura en el rostro que hasta le hace parecer más joven, galanura la tiene. Y, con el índice en alto salió al tercio a anunciar, caso insólito que...¡Regalaba un toro!
También de las dehesas de don "Teófilo Gómez" fue el de obsequio. Cárdeno,
La "Pelea de Gallos" himno de guerra de los de Aguas, reservado a tocarse exclusivamente para sus toreros, sonó la tarde del domingo varias veces: en las faenas del Maestro Eulalio López, sus últimas en esa plaza y en los momentos vibrantes de la faena del de regalo de Morante, que tras un desafortunado pinchazo seguido de estocadón quedó en una oreja.
Asi ha transcurrido la muy emotiva despedida del torero de Atzcozalco compartida con la transcendente actuación del de la Puebla del Río en esa feria la del grito de guerra:
¡Viva Aguascalientes...qué su feria es un primor!
Mientras en Madrid, se inicia la venta de localidades para la próxima temporada venteña. Largas colas formaron los aficionados, dejando clara muestra de que los toros ¡No interesan a nadie!
PÍES DE FOTOS:
FOTO 1.- El tiempo detenido en los vuelos de un capote. Morante y su muy peculiar...lentísimo toreo de capa.
FOTO 2.- Sobria y a la vez elegantemente vestido el de La Puebla del Río en un muy bajo pase de trincherilla.-
FOTO 3.- Eulalio López "Zotoluco" su tarde de despedida en la Monumental de Aguascalientes.
FOTO 4.- En Madrid, las calles aledañas a la Plaza Las Ventas, se formaron largas filas para la compra de boletos, corridas de la venidera feria.