En la corrida de La Beneficencia hoy, el gran acontecimiento acaba de ocurrir y por supuesto que da para comentarle mucho, mucho habrá que teclear, pero, primero tenemos que terminar de disfrutarlo, terminar de asimilarlo. Por ahora los titulares de los portales lo dicen todo:

"José Mari Manzanares. La faena de su vida".

"Una tarde para la memoria". "Sublime, Manzanares hace historia". Monumental. Descomunal. Como nunca. Hoy ha toreado. Maravillosa obra de arte. Tremendo con ese arte y esa torería que tiene. Se paró el tiempo... Estos son algunos de los adjetivos a su triunfo,

"La perfección en todos los tercios". "Vuelve el romance con Madrid". "Madrid se rindió". "El Maestro JM Manzanares se consagra". Vamos hasta en catalán se expresaron: "No tenía res mes alacantí pero a celebrar l'obra d'art".

De seguro, Dios en su Santa Gloria permitió y compartió el disfrute de José María padre de este tan esperado triunfo: ¡Que orgullosos y felices tienen que estar allá arriba!

Y, a otras cosas: Una gran pérdida.

Año de 1925, el 4 de diciembre, fecha de nacimiento en la blanca Mérida de un inquieto e inspirado artista: Humberto Peraza Ojeda, que con solo veinte años de edad se desempeñó productivamente y asimilando las enseñanzas de un gran maestro, el francés Alfredo Just encargado por el emprendedor Neguib Simón de elaborar las esculturas, verdaderas obras de arte que habrían de exornar, siendo cada vez más admiradas; los monumentales bronces que rodean la Plaza México, de todas, quizá la más famosa, conocida y fotografiada es la llamada "El Encierro” sobre la cornisa de la columnata que da el acceso principal a la plaza. Siendo un chamaco veinteañero se desempeñó como ayudante-aprendiz del gran maestro Just.

Pero la obra del Maestro Peraza, él sí; verdadero Maestro, pues cursó la licenciatura en Artes Plásticas  en la Escuela de Bellas Artes concluyendo después la Maestría en Escultura, está considerada como la mejor de México. Hoy, con ocasión de su fallecimiento y en rara manifestación de reconocimiento unánime, cronistas, escritores, comentaristas, toreros, gente del toro, todos de manera uniforme aseveran que Humberto Peraza es, era, seguirá siendo el máximo exponente de la escultura artística en su manifestación de expresiones taurinas.

Van unos comentarios en torno a un escrito. La mera verdad; la modestia no es una virtud que me adorne, el relato —"relato narración biográfico"—, es el nombre correcto: ¡En ese espejo no te has de mirar!, ha tenido mucho éxito, muchas replicas y multitud de visitas al portal que lo publicó originalmente, aquí el link: archivo.e-consulta.como/blogs/consultarlo/en-ese-espejo-te-has-de-mirar

Hubo incluso, colegas médicos que me sugirieron se buscará a través de la dirección del Hospital Civil de Guadalajara alguna posibilidad para que al Pana se le leyera esa narración.

De ahí, esta nota aclaratoria, en principio, ese texto no es nuevo fue escrito en junio del año de 2012. Y pasado algún tiempo, toreaba El Pana, una vez ocurrido en La México lo de Rey Mago; en La Concordia de Orizaba toros de Garfîas, en el callejón estuvo esa tarde José Antonio Morante de la Puebla fue a ver a ese torero que también era Brujo. Iba Morante, llevado del brazo de don Pepe Ibañez, quien culpable fue de que el de Apizaco, Tlaxcala y el de la Puebla del Río toreasen después muchas veces juntos. El inquieto e ingenioso Don Pepe llevó al Pana también a plazas francesas. De esa tarde ahí, resultaron muchas cosas buenas para el de Apizaco.

Por la noche, después de la corrida, en el hotel Fiesta Cascada puse en las manos de Rodolfo Rodríguez el manuscrito completo y editado de "En ese espejo no te has de mirar", Rodolfo, pasaba, en otro intento más, por días de abstinencia. "Me va servir mucho, pues estas noches - que no tomo - me cuesta mucho trabajo dormir"

A la mañana siguiente, a las 7 horas, acababan de abrir el restaurante y Rodolfo ya estaba ahí con una humeante y aromática taza de café de Córdoba a un lado y el engargolado a su diestra. —¡Está muy güeno! Me gustó mucho.—, me dijo. Por aquellos días se hablaba mucho de la película por rodar: biografía de El Pana.

Voy a entregar esto al guionista—, fue lo último que me dijo en torno al tema.

Nunca supe nada más de la tal película. Escuché rumores varios: que estaban reuniendo material fílmico de sus presentaciones, que sí el cineasta Carlos Reigadas tenía en sus manos el guión, que si andaban buscando locaciones por el rumbo de Tenexac, puros falsos comentarios; Reigadas Anduvo por Tene por otras razones. Todo quedo en eso: Rumores.