Lourdes Montes Rivas, antes de ser nombrada la titular de la dirección de tránsito municipal de San Martín Texmelucan, durante la administración de Norma Layón como presidenta municipal, tomó el cargo de comisario de la Policía Municipal en Coronango.
Su corta estancia en ese encargo, obedecen que habría sido ligada a la protección de las bandas huachicol, que no es otra cosa que protección a quienes se dedican al robo de hidrocarburos, por lo que no alcanzó a terminar una administración.
En la actualidad Monte Rivas, ha sido blanco de sendas quejas por parte de su personal, por cuestiones que van desde el abuso de autoridad y también protección a distintos grupos delictivos.
La directora de vialidad municipal, además de ser una de las consentidas de la alcaldesa de Texmelucan, es quien trajo a las filas de la Policía Municipal, a Gaspar Guerrero Pérez, quien vio desvanecida su intención de ser el director de la corporación, al salir a relucir que estuvo preso en el municipio de Atlixco por el delito de homicidio.
En otras palabras toda el área de la Secretaría de Seguridad Pública de Texmelucan debería de ser investigada porque sus directivos han resultado tener cuentas pendientes con la justicia o haber cumplido condenas, que en los dos casos es relación con grupos del crimen organizado.
Si tomamos en consideración que en últimas fechas se han registrado en este municipio diversos homicidios violentos, desapariciones, asaltos a mano armada, sacaríamos a reducir que no hay seguridad ni para los habitantes ni para los negocios en una ciudad cómo Texmelucan, en otras palabras que su seguridad sigue siendo pésima.
Los próximos días se habría de dar a conocer el nombramiento de quién va a ser el nuevo director de policía, pero sería también importante una barridita completa en todas las instalaciones.
Contra-Ataque de mafias en el Cereso de Cholula
No está usted para saberlo, ni un servidor para comentárselo, pero al interior del Centro de Reinserción Social de Cholula, ocurre una revuelta organizada por bandas dedicadas a la venta de teléfonos celulares, a la venta de sustancias psicotrópicas, así como también como a negocios ilícitos.
Usted debe saber en ese penal hay un nuevo director Irving Prado Triana, y que éste, de primera instancia se dio la tarea no sólo de suspender negocios al margen de la ley, sino también de separar a grupos que mantenían el control lo que ha originado sendas molestias que amenazan con un conflicto mayor al interior
De entrada y aunque parezca chiste el director ha sido acusado por dar por terminado el negocio de la renta de teléfonos y de otras ventas por los mismos familiares de internos quién expide que regresa en esas condiciones ilícitas.
En breve los líderes de estos grupos tal como ocurrió en el Cereso de San Miguel, o el de Huejotzingo, van a ser objeto de traslados a otros penales para evitar algún tipo de hecho violento.
Nos vemos cuando nos veamos